miércoles, 7 de octubre de 2015

ORACIÓN





Este poema es la oración del futuro, fue escrita en el año 1986 coincidiendo con el inicio de la última generación del Apocalipsis. Cuyo final definitivo se producirá en el 2061, es decir setenta y cinco años más tarde. Si tenemos en cuenta que son 28 ciclos de 75 años cada uno, en conjunto nos da 2100 años, que es el tiempo durante el cual ha transcurrido el Apocalipsis completo.

Por más que los sacerdotes utilicen el anatema contra nosotros e intenten degradarnos públicaqmente, los hijos de los cielos nacemos sin pecado original, nacemos limpios, luminosos, inteligentes y somos guerreros valientes; nuestro trabajo lo realizamos al margen de iglesias, de todas las iglesias, de todos los eclesiásticos, de todos los obispos, arzobispos, cardenales, papas y demás gentes que pululan por esos “territorios” de la mezquindad humana. Saben que esta oración no es para ellos, sus miserias les han excluidos, fueron excluidos hace dos mil años personificados en los sacerdotes judíos, que son los que acabarían matando a Cristo. Eternamente, todos los sacerdotes de todas las religiones de todas las iglesias matan al Cristo de la libertad; a ti hermano, a ti hermana, a cuantos portamos la verdad y la autenticidad humana en nuestros espíritus, universales y unitarios, el Cristo de la inclusión de todos los seres humanos en el nuevo humanismo, tu Cristo y el mío, hermano-hermana, que lucha, gran guerrero, por implantar en la faz de la Tierra, nuestro planeta, nuestra fascinante nave de Noé, todos y cada uno de los atributos y virtudes del ser humano.

Somos los que somos, los justos, los seres de la bondad, del optimismo, de la generosidad, de la piedad, de la inteligencia y del sentimiento. Aunque vivamos en un mundo de tanta confusión y perversión como es el tiempo actual, de tanto ladrón que se hace proteger por la policía, mientras nos envía a parte de sus miembros fuertemente armados contra nosotros, para violentarnos y reprimirnos; de tanto inmoral e impío imponiendo a sangre y fuego el dios ideológico y arbitrario de su mísera religión -sabed que con ninguna religión convive el padre de la unidad, que las iglesias permanecen vacías de contenido; es evidente, él no puede estar con quienes excluyen de modo sistemático a los seres humanos- Aunque finalmente seamos perseguidos hasta la saciedad y los jueces injustos nos metan en la cárcel, triunfaremos porque la Tierra es nuestra, de nuestros pueblos, de nuestras gentes, la recibimos prestadas de la mano de nuestros hijos para que la trabajemos en beneficio de las generaciones humanas, de las humanidad entera.

Es la oración del futuro, de un futuro sin iglesias, pues los sacerdotes saldrán corriendo, alocados por el terror de haberse convertido en lo que son, los servidores del egoísmo, de la rapiña, del oro, del poder omnímodo, de la deshumanización generalizada de sus iglesias y de la sociedad que dominan con mano de hierro. Nosotros los hijos de los cielos nacimos sin pecado original, constantemente estamos muriendo y naciendo pues fueron los dioses quienes nos encomendaron cuidar del planeta y procurar su evolución armónica. Evolución que va acompasada con nuestra propia evolución espiritual, pues está escrito que ambas se producirán en paralelo.

Salud hermano-hermana. Anselmo Ruiz.

Nota: la oración permanece inscrita en el gran templo de la espiritualidad de la Tierra, al que sólo pueden y podrán acceder los hijos de los cielos. Para conocer los pormenores del texto esperad a que se publique mi libro Almoneda.






oración
a mi padre espiritual
y maestro urko (mi prójimo más próximo)

padre nuestro
que has creado
los cielos y la tierra,
has iluminado
de tu inteligencia
nuestras mentes
y llenado nuestros
corazones de tu amor

dirígenos las manos
en la realización
de nuestra obra,
y así podamos
ofrecértela a ti,
luego de la muerte
en esta vida oscura
y el renacimiento
en la tuya de luz

padre nuestro
que estuviste,
estás y estarás
por tiempo y espacio
infinitos, deséanos
eternamente
ser tus hijos amados

Anselmo.





No hay comentarios:

Publicar un comentario